Economía en sentido contrario: Banamex
Oaxaca, Oax., 5 de agosto de 2009 (Quadratín).- Primero fue Enrique Peña Nieto y, casi enseguida, Carlos Salinas de Gortari. El primero estuvo en la ciudad de Oaxaca en el mes de julio, el segundo el sábado primero de agosto. La visita del gobernador del estado de México fue discreta y la versión extraoficial fue que estuvo en calidad de turista. Más protagónico, el controvertido ex-presidente se dejó ver y entrevistar por algunos medios, sin dejar de aclarar que su status era también de turista.
Sin embargo, ambos tuvieron el mismo propósito: sostener reuniones privadas con el gobernador Ulises Ruiz y con los diputados federales electos del PRI.
Peña Nieto se reuniría también con un grupo de empresarios con quienes abordaría el tema de la sucesión del 2010 en Oaxaca, lo que Salinas no hizo
por ahora.
¿Qué conclusiones se pudieran adelantar sobre estas dos visitas de alto nivel y sobre el inicio de las giras por los municipios de usos y costumbres de parte del excandidato presidencial del FAP, Andrés Manuel López Obrador?
En primer lugar, que es un hecho que ya Carlos Salinas está de regreso y que será, de facto, el eje de las componendas y arreglos políticos entre los gobernadores y los grupos de poder de cara a la sucesión presidencial del año 2012.
Y estas componendas y arreglos pasarán necesariamente por la próxima legislatura federal y la bancada priísta, constituida ya en primera fuerza electoral nacional y en un factor determinante en las relaciones con el poder ejecutivo federal.
Si ahora un personaje fuertemente criticado por la oposición y por importantes sectores de la opinión pública llega a Oaxaca para entrevistarse con el gobernador Ulises Ruiz no es precisamente por el peso que pudiera tener en la próxima legislatura federal la bancada oaxaqueña, sino porque Ruiz Ortiz ha extendido su influencia electoral en otras entidades. Y este factor tiene un peso significativo tanto para las aspiraciones de Peña Nieto, a quien Salinas de Gortari ya dio su bendición, como del propio Ulises Ruiz. El primero porque está sumando apoyos a su precandidatura y el segundo porque está empeñado en pelear la Presidencia del CEN del PRI.
Autoerigido como el factótum de la política priísta , el que fuera bautizado por Andrés Manuel López Obrador como el Innombrable, es probable que no solamente hubiese abordado con URO el tema de la sucesión del 2012 sino también el del 2010 en Oaxaca, asunto en el que Enrique Peña Nieto si mostró interés en su encuentro con un grupo de empresarios en la idea de ir pulsando el nombre de un candidato del PRI a la gubernatura que garantice unidad y reconciliación entre todos los grupos políticos y económicos de la entidad.
El otro Innombrable (así también califica CSG a AMLO: Milenio, 2-VIII), recorre la misma ruta crítica de las dos sucesiones pero con otros actores y estrategias: reorganizar y recuperar su base social en Oaxaca y reconstruir el Frente Amplio Progresista para irse posicionando de nueva cuenta para la lucha presidencial del 2012 e influir en la sucesión oaxaqueña. Solo que, fiel a su estilo, pretende imponer sus propias reglas que no necesariamente responden al entorno político-electoral de Oaxaca y ya desde ahora ha externado su veto al PAN; y por si algo faltara para entorpecer la difícil meta de constituir en menos de dos meses un frente cívico-electoral, AMLO parecería que también ya tiene candidato y eso seguramente complicará aun más las negociaciones.
¿Quién dijo que no son tiempos políticos sino de trabajo? Todo lo contrario, como solía ocurrir en Oaxaca antes del arribo del PAN a la Presidencia de la República, hoy , ante la eventualidad de que el PRI regrese a los Pinos, los factores externos pueden volver a jugar un papel determinante en la sucesión del candidato a gobernador. Y la presencia de CSG y Enrique Peña Nieto, así lo evidencian. Bajo estas circunstancias el desenlace de la disputa interpriista lo mismo puede arrojar un nombre distinto al de Jorge Franco que confirmar su designación in pectore. Al tiempo.
*Investigador y académico de la UABJO, miembro distinguido de la sociedad civil
Foto: Milenio